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1518

Según la visita del año 1518, la ermita de Santa María Magdalena se encontraba a cargo del concejo, y por las recomendaciones de los visitadores estaba todavía en construcción, sin acabarse de techar, faltándole las puertas y los principales elementos en su interior. Aparte de varios frontales, cruces y lienzos para el altar, disponía como fuente de rentas de 22 pies de olivas, una tierra camino del Barco, con un olivo donde cabían 10 celemines de trigo, y dos tierras camino de Zorita, de una fanega de cebada[63].

2000

Ermita de la Magdalena en reconstrucción.

1576

En 1576, aún se conservaba [1].

1516

Situada junto a los muros de Almonacid, estaba bien edificada y recibía mucha devoción. Sin embargo, necesitaba mejorarse, y para ello, además del cepo para depositar limosnas, recomendaron los visitadores que durante la Semana Santa se pusiera tras su altar una cruz sobre una almohada, para que cuando los fieles vinieran haciendo las estaciones, contribuyesen con dontaivos a la mejora de esta ermita. Como en otras ermitas y cofradías, sus cuentas no estaban asentadas en un libro, que se ordenó comprar[71]

1569
Almonacid

Esta ermita se menciona en la averiguación de 1569 [250].

1577

En el acta de visita del año 1577 se registra que la ermita había comprado un cáliz de plata por 4.879 mrs. y un misal romano de los nuevos de 35 reales. La ermita se situaba extramuros, junto al pueblo y se conservaba en buen estado. El documento también señala que los visitadores pasados habían ordenado que se hiciese un retablo para el altar principal de la capilla, ya que el que tenía era viejo y anticuado. En este retablo debía pintarse "de pincel" una imagen de Santa María Magdalena, con cargo al alcance de más de 7.000 maravedíes que estaban disponibles, con ayuda del concejo y de limosnas de los vecinos si fuera necesario. Se recomendaba encargarlo a un pintor que vivía en Albalate, considerado "buen maestro" y no muy grande para que no costara demasiado, ya que se trataba de una ermita muy importante para los vecinos del pueblo. Se pidió tambier comprar guardapolvos para los altares colaterales[2]. Entre las cuatro ermitas que tenía Almonacid en 1580 se menciona ésta de la Magdalena [3].

1589

Se visitó la ermita de la Magadalena, donde se representaban comedias, lo que se prohibió[1].

1569
Borox

En el año 1569 aparece una nueva ermita, la de la Magdalena, que fue construida gracias a la devoción de los vecinos de la villa[250].

1534

La ermita de Santa María Magadalena, a cargo del concejo de Fuentelencina, se encontraba muy mal reparada, a juicio de los visitadores, que ordenaron diversas reformas, entre ellas pintar una imagen de la Magadalena, y un zaquizamí o artesonado en el ábside sobre el altar, colocar las imágenes que allí estaban de manera más protegida, cerrar las gateras, y mejorar el estado general del templo[140] .

1552

En la inspección del año 1552, los visitadores observaron que la ermita aún no había sido reformada tal y como se había ordenado en anteriores visitas. Como descargo de su conducta, los oficiales del concejo adujeron que a causa de estar ubicada en un lugar muy alto, a una legua de la población, el aire la destejaba, "syempre el tejado está desbaratado, que aunque se trasteje dos vezes cada año no basta" y que por eso las reparaciones servían de muy poco. Además les informaron que sólo iban allí una vez al año en procesión, y que hacía ya dos años que no acudían, puesto que el prelado había ordenado que no fueran en procesión a más de media legua, y la ermita se encontraba más lejos. Debido a todos estos motivos tenían intención de trasladarla a un lugar más cercano, el despoblado de Conchuela, que sólo estaba a media legua, y del que permanecía en pie su iglesia, aunque pertenecía a los "racioneros" o cabildo de la diócesis de Toledo. Los visitadores comunicaron a los vecinos que la sugerencia era buena, pero para llevar a cabo dicho traslado tenía que autorizarlo el Capítulo General de la Orden de Calatrava que se estaba celebrando en Madrid. Mientras tanto, no deberían permitir que entrase ganado en la ermita, ni se hicieran fuegos en el interior del santuario, tapiando para ello las puertas. [140]

1557

Esta ermita había sido reparada siguiendo las instrucciones de la visita de 1552, y por ello el concejo recibió el agradecimiento de los visitadores.[140]

1569
Fuentelencina

La ermita de Santa María Magdalena aparece mencionada en las averiguaciones de 1569 en la villa de Fuentelencina, y carecía de bienes, sustentándola su mayordomo por devoción[250].

1577
Fuentelencina

La ermita de Santa María Magdalena se encontraba a media legua de la villa, mantenida por el concejo de Fuentelencina, estaba en buen estado y tenía una campana delante del altar, sin necesidad de reparación alguna[1].

1589
Fuentelencina

La ermita de Santa María Magdalena estaba en el despoblado de Conchuela, a media legua de la villa, continuaba al cuidado del concejo de Fuentelencina y se encontraba limpia y decente, a cargo de Gaspar de Escamilla, que en su última cuenta fue alcanzado en 269 maravedíes y 4 fanegas de trigo[1].