Cofradías, Ermitas y Cabildos

Ver texto con notas

 

Albalate
Ermita de Santa María de Cubillas
08120001

1534

Recordándose que la ermita de Santa María de Cubillas, al igual que la ermita de Santiago, también se encontraba a cargo del concejo, los visitadores elogiaron las reformas que había recibido en los últimos tiempos. Su retablo y altar "bien deçentes" habían sido completados con un órgano nuevo. Sólo faltaba hacer un inventario de sus pertenencias. Una casa también nueva para alojar al santero y a los que acudían a velar también fue motivo agradecimiento por los visitadores[30].

 
08120002

1541

Según la visita de 1541 la ermita gozaba de mucha devoción entre los vecinos de la villa, se había blanquedado su interior y también habían pintado un letrero corrido en lo alto desde la última visita. Los visitadores, comprobando que disponía de fondos, recomendaron construir una tribuna de madera o de obra sobre la puerta que estaba enfrente del retablo principal, que cubriera de pilar a pilar, esto es todo el ancho del edificio. Junto a uno de los pilares se colocarían los órganos, y se añadiría una escalera a la mano izquierda para acceder a la tribuna. Si les llegase el dinero, se podría encargar una reja de madera torneada para el altar principal donde estaba el retablo, que subiera hasta las basas de los pilares, haciéndolo sin quitar un crucifijo que allí había, viejo pero que inspiraba mucha devoción. Se conservaba bastante bien la casa destinada al santero y a los veladores que acudían a Santa María de Cubillas, aunque todavía le faltaban algunas puertas. En esta ermita, los oficiales y alcaldes del pueblo mandaban decir cada semana una misa por sus bienhechores, hecho que fue elogiado por los visitadores [32]. En el inventario de su ajuar se anotan una cantidad considerable de objetos para el culto: textiles, como frontales, sábanas, lienzos, camisas, delanteras, mantas, etc.; de orfebrería, como cadenas de plata, campanillas, lámparas, sartas; muebles como escaños, arcas, andas, cruces, imágenes (de Santa Quiteria); también había recipientes de cristal(ampollas), unos "hórganos con sus entonaçiones" y cuatro bulas. Sin embargo se registran sólo como bienes raíces 48 pies de oliva en el olivar de la villa, y en Traslacuesta [33].

 
08120003

1555

Se incluye en esta visita un detallado inventario sus bienes muebles. Tenía muchos ornamentos entre los que destacaba un cáliz y patena de plata de peso de una libra, 5 onzas y media y una cuarta, por valor de 5.984 maravedíes, más la hechura. los bienes raíces consistían en 61 pies de olivas. En la últimas cuenta el alcance de había sido de 3.277 maravedíes. En la visita al templo se comprobó el buen estado del altar mayor, donde estaba una imagen de la Virgen, y de los otros dos. Los visitadores pidieron sustituir una pintura vieja con la imagen de San Blas que había en uno de ellos por un retablo "que sea de muy buena mano y pintura y no de muncha costa". El otro altar estaba dedicado a Santa Ana, en un retablo que se calificó como "muy bonico", pintado al "romano" pidiéndose colocar un lienzo azul que sirviera de guardapolvos. Se ordenó también reparar los poyos del interior y las paredes. Como tenía muchos ornamentos, los visitadores pidieron vender algunos y encargar una imagen de Nuestra Señora de mayor tamaño que la que había, y que estuviera coronada. Se visitó la casa del santero, donde se ordenó colocar unas puertas[34].

 
08120004

1575

La contestación a las Relaciones Topográficas ordenadas por Felipe II describe esta ermita, con tres naves y tres retablos. Santa María de Cubillas era la ermita más antigua de la villa. Según las Relaciones, había quien decía que era de la época de los Templarios [31]

 
08120005

2000

Actualmente sus restos sirven de cementerio en Albalate. Esta ermita, denominada de Cubillas, o de Nuestra Señora del Cubo, conserva en buen estado el muro situado al sur, en el que destaca una portada del siglo XIII (transición del románico al gótico) en arco apuntado múltiple decorado con puntas de diamante y ziz-zag, rematándose el muro en capiteles vegetales y canecillos decorados con temas vegetales, animales e iconografía diversa.[1]