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Pozo

El "pozo de los pilares", de donde se abastecía todo el pueblo, estaba en buen estado, excepto las gradas de su brocal,que estaban maltratadas y se mandó hacerlas de nuevo de yeso, un gasto liviano. El pilón al que llegaba el agua de la "fuente dulce" ya no la recibía, y por ello en la visita precedente se ordenó que se reparase. Se había encargado esta obra a Juan de Luque "maestro de aquella arte", pero no se había llevado a término. La razón para ello residía en que: "nos dixistes que avíades seído ynformados de personas que lo sabían, que la dicha fuente no se podía traer por ser el agua poca y el trecho largo, como por benir en algunas partes el agua cuesta arriua, y que ansymesmo avían señalado vn sityo a donde mejor estaría el pilar y podría benir el agua sin trauajo y a menos costa. Y lo fuimos a ber por vista de ojos, y nos pareçió questaría bien el dicho pilar a par de la cruz del olmo Carramondéjar..." Como los propios del concejo eran muy reducidos, se ordenó realizar uno o varios repartimientos anuales para mover de sitio el pilón, y que los vecinos colaborasen en abriz la zanja, hacer yeso, con tal de que la obra estuviera concluida en dos años[219].

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Pozo

Fuente situada aproximadamente donde debió de estar la mencionada en las visitas del siglo XVI.

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Pozo

D. Antonio Hurtado, alcalde, señalando la localización del antiguo pozo.